Nadie puede estar enfermo si la acción o decisión que toma es coherente con  su sentir  Ejemplo: Si una mujer en su corazón sabe que la relación con su pareja no le  genera paz, y en vez de tomar acción y terminar la relación, se queda; esta per-  sona entrará en un conflicto interno diario que la llevará a deprimirse y sin du-  da alguna a comer de más, para levantar al cuerpo que necesita seguir adelante.  Te propongo hagas el siguiente ejercicio en donde, podrás observar cuales son  las áreas relacionadas a la comida primaria que tienes balanceadas y cuales están claramente en déficit. La deficiencia de una comida primaria, hará que tu  alma sienta un vacío y tu cuerpo reaccione queriéndolo llenar comiendo sin  control algunos alimento.

 Ejercicio: El Círculo de la Vida  Este ejercicio te ayudará a descubrir qué alimentos primarios le están faltando  a tu alma. El Círculo de la Vida tiene 12 secciones, espiritualidad, creatividad,  finanzas, carrera, educación, salud, actividad física, comida casera, ambiente  en el hogar, relaciones, vida social y placer.  Observa cada una de ellas y pon un punto dentro de cada espacio que significa  el nivel de satisfacción que tienes en cada área de tu vida. Un punto cerca del  centro o la mitad del círculo significará insatisfacción, mientras que un punto  cerca de la orilla externa del círculo significará máxima satisfacción.

Cuando  hayas puesto los 12 puntos, únelos con líneas y aparecerá tu propio círculo de  la vida.  Mientras más circular sea la gráfica obtenida, mayor balance tendrás en tu vida  en relación a las comidas primarias, por otro lado, mientras más deforme sea  el resultado de la gráfica, indicará que debes tomar decisiones en algunas  áreas para encontrar el balance y alegría en tu vida. Una vez tomes las  decisiones adecuadas, estarás en el camino de no tener que llenar esos vacíos  del alma con comida.  

 

En los pasos anteriores he descrito como las emociones piden comida para  mantenerse ocultas y no salir a la superficie. El dejar de comer en momentos  que no tenemos hambre, nos permitirá tener la vivencia de las emociones y  explorarlas tal como son, de esta manera comenzaremos a resolver más y  comer menos.  Es común escuchar frases terrorí?cas acerca de la comida, tales como:  “Todo lo rico es lo que engorda”  “El dulce me engorda”  “Las proteínas adelgazan”  “Después de navidades hago dieta”  “No puedo comer porque estoy a dieta”  Todas estas frases muy comunes en nuestra cotidianidad, forman parte de una  creencia colectiva que coloca a la comida como un objeto al que hay que ten-  erle cuidado porque ella por sí sola es la personificación del bien y del mal. 
 

Es necesario aclarar que la comida es simplemente una fuente de energía que  nuestro cuerpo necesita para funcionar.